Ingredientes para 4 personas
- Macarrones: 1/2 kilo
- Salsa de tomate: 5 cucharadas soperas
- Leche: 1/2 litro
- Harina: 2 cucharadas soperas
- Mantequilla: 1 cucharada sopera
- Sal: 1 pellizco
- Aceite de oliva: 1 chorrito
- Queso rallado: al gusto
Preparación
- Se ponen los macarrones en una olla llena de agua. Se añade la sal y un chorrito de aceite de oliva y se lleva a la ebullición
- A parte, se vierte la salsa de tomate en una bandeja de hornear y se esparce por el fondo
- Cuando los macarrones están cocidos se cuelan y se vierten en la bandeja del horno con el fondo de tomate
- Se sala nuevamente para que queden más sabrosos y crujientes y se reservan
- Por otro lado se prepara una bechamel ligera poniendo la leche en un cazo junto con la mantequilla, un pellizco de sal, la harina y si se desea se le puede añadir un poco de pimienta o nuez moscada
- Sin dejar de remover con unas varillas, se lleva el cazo a la ebullición. Poco a poco la mezcla se va ligando y se va haciendo más cremosa
- Cuando la bechamel está al punto se retira del fuego y se vierte cuidadosamente encima de los macarrones
- Con la cantidad de queso deseada, se espolvorean los macarrones con bechamel y se acompaña con unos pequeños montoncitos de mantequilla que harán que el queso quede más cremoso
- Se pone la bandeja en el horno y se gratina durante 5 o diez minutos hasta que el queso quede ligeramente doradito y se sirve bien caliente